100 años HARIBO: de pequeño taller artesanal​ a líder mundial

Hans Riegel coloca la primera piedra del éxito de HARIBO: inventa el OSITO BAILARÍN, una figurita de oso hecha de caramelo de goma que más tarde se haría mundialmente famosa como el legendario Osito de Oro de HARIBO. Era más grande que los Ositos de Oro actuales, pero también más delgado. En aquella Alemania inflacionaria, dos OSITOS BAILARINES costaban tan solo un centavo.

El aumento de la demanda obliga a hacer una inversión inicial en tecnología de transporte más moderna: HARIBO adquiere el primer coche equipado con carteles publicitarios para continuar abasteciendo a sus clientes. Hasta ese momento, la producción diaria se había entregado​ en bicicleta, y hasta la esposa del fundador participaba en el reparto.

Hans es el primogénito de tres hermanos. En el año 1924 le sigue su hermana Anita y en 1926, su hermano Paul. Hans y Paul se hacen cargo de la dirección de la empresa HARIBO a mediados de los años 40.

La segunda clave del éxito de HARIBO: Hans Riegel comienza a fabricar dulces de orozuz. Los sticks de orozuz decorados con el logotipo de HARIBO se convierten en los favoritos de los clientes. Pronto les siguen muchas otras especialidades, como los mundialmente conocidos discos.

Los representantes comerciales ya suministran productos HARIBO por toda Alemania. En 1933 ya se puede hablar de una PYME con aproximadamente 400 empleados. Al mismo tiempo, se termina el edificio principal de la fábrica de Bonn. La última genialidad es su eslogan publicitario, tan simple como pegajoso: «Haribo macht Kinder froh», que en español se podría traducir por «Haribo hace felices a los niños». Además, la familia del OSITO BAILARÍN crece con un nuevo pariente: el OSITO TEDDY.

La guerra y la escasez de materias primas impactan duramente en la economía y HARIBO también se ve afectada. Además, en 1945 también fallece con solo 52 años el fundador de la empresa, Hans Riegel. Su esposa Gertrud toma el relevo en la dirección de la empresa durante la inmediata posguerra.

Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, comienza la reconstrucción de la empresa con solo 30 empleados. En 1946, los hermanos Hans y Paul Riegel sustituyen a su madre en la dirección de la empresa. Hans Riegel se hace cargo del área comercial, de marketing y ventas. Su hermano Paul dirige el departamento de producción. El éxito no tarda en llegar: en 1950, solo cinco años después de la guerra, HARIBO ya tiene unos 1000 empleados.

Salen al mercado los Ositos de Oro HARIBO. El enorme éxito de este dulce su producto icónico hace que HARIBO solicite un certificado oficial de nacimiento para sus Ositos de Oro: en 1967, la agencia alemana de patentes reconoce oficialmente los Ositos de Oro como marca registrada. Ahora ya son mucho más que unos simples ositos de goma: aquí puedes descubrir todos los secretos de nuestro número 1.

Desde sus inicios, HARIBO se dio cuenta de la importancia de la televisión, un nuevo medio de comunicación en aquel momento.​ La publicidad de HARIBO se emite por primera vez en la televisión alemana. A mediados de los 60 se completa su eslogan publicitario «Haribo macht Kinder froh» con el añadido «und Erwachsene ebenso», que en español se convierte en «Vive un sabor mágico, ven al mundo Haribo». En nuestro canal de YouTube se puede acceder a anuncios de televisión de los más de 50 años de la historia publicitaria de HARIBO.

Los años 70 llevan consigo un cambio en las expectativas estéticas de los clientes que acaba traduciéndose en la evolución de la forma de los Ositos de Oro: la posición de las patas, más separadas en principio, se cierran, y los Ositos de Oro adquieren el aspecto compacto y estilizado que conservan hasta el día de hoy.

HARIBO adquiere la empresa Edmund Münster GmbH & Co. KG, que por entonces tenía su sede en Neuss. La tradicional marca MAOAM pertenece ahora al Grupo HARIBO. El logotipo MAOAM se ha conservado prácticamente igual desde su lanzamiento y ya resulta inconfundible. Durante mucho tiempo ha sido uno de los logotipos​ más conocidos entre las principales marcas.

Los Ositos de Oro cambian su apariencia: los colores se vuelven un poco más pálidos porque se obtienen a partir de concentrados de frutas y plantas. En el empaque aparece por primera vez la ilustración del Osito de Oro amarillo con un lazo rojo.

HARIBO se hace cargo de la empresa belga de golosinas Dulcia, que llevaba décadas produciendo sus populares nubes con nombres como Soft-Kiss, Coco-Balls o Rombiss. A mediados de 2007, el nombre de Dulcia desaparece de los empaques y los clientes empiezan a encontrar en el supermercado sus productos espumados con la denominación Chamallows HARIBO.

El ayuntamiento de Bonn homenajea a Paul Riegel por su «destacada contribución» a la ciudad como centro financiero con su incorporación al «Libro de Oro» de la ciudad.

Para celebrar su 85.º cumpleaños, los Ositos de Oro estrenan un nuevo sabor, un nuevo diseño de bolsa. Incorporan además un sexto sabor, el de «manzana». Los consumidores ya pueden disfrutar de unos Ositos de Oro mucho más jugosos.

Despegue de una década de cooperación excepcional: dos Boeing 737-800 de TUIfly, el GoldbAIR y, a partir de 2010, el HaribAIR, se presentan como embajadores voladores con un diseño exclusivo de Ositos de Oro HARIBO. A partir de mayo de 2015, la flota HARIBO/TUIfly se completa con el vistoso colorido del avión Tropifrutti.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia admite a Hans Riegel en la «Legión de Honor» (Légion d’Honneur) con el rango de «Chevalier». Un honor que solo se ha concedido hasta ahora a muy pocos extranjeros. Hans Riegel introdujo la marca HARIBO en Francia en el año 1967.

El copropietario Paul Riegel muere inesperadamente el 2 de agosto de 2009. Era el responsable de producción y tecnología. Consumado inventor, diseñó por sí mismo muchas máquinas, como su más conocido invento: la máquina de enrollar ruedas de regaliz. Paul Riegel participó en numerosos proyectos y organizaciones sociales consiguiendo un reconocimiento unánime.

Después de sus éxitos en el automovilismo entre los años 70 y los 90, HARIBO regresa a los circuitos con el equipo Manthey. Con sus dos Porsche con los colores de HARIBO, el equipo impresiona en el Campeonato de Resistencia de la VLN y en las 24 Horas de Nürburgring. En su última temporada​ en 2017, HARIBO consigue la novena posición con el Mercedes-AMG Performance Team en la clásica de 24 horas del «infierno verde».

Hans Riegel muere el 15 de octubre de 2013. Dirigió durante 67 años el destino comercial de HARIBO y acabó convirtiéndose en el director general en ejercicio de mayor antigüedad en Alemania. Dejó una profunda huella en HARIBO e influyó decisivamente en el sector de las golosinas nacional e internacional. Hans Riegel dedicó toda su vida a HARIBO y al deseo de endulzar un poco la vida de pequeños y mayores.​

Los socios de HARIBO GmbH & Co. KG votan en 2013 por una nueva sede en Renania-Palatinado, en el municipio de Grafschaft. El terreno de 27 hectáreas que se adquirió al año siguiente está muy bien comunicado y proporciona espacio suficiente para un gran centro de logística, una de las líneas de producción de tres niveles más avanzadas y un nuevo moderno edificio administrativo.

El 2 de mayo, los empleados comienzan a trabajar en Grafschaft, la nueva sede de HARIBO Alemania y sede central internacional del Grupo HARIBO. Hans Guido Riegel: «Un gran paso para nosotros y para HARIBO y otro importante hito en la historia de la empresa». Añade: «Bonn seguirá siendo siempre parte de HARIBO».

La tercera generación de esta empresa familiar celebra su aniversario el 13 de diciembre de 2020. Durante 100 años, los productos HARIBO han endulzado nuestra vida cotidiana con pequeños momentos de felicidad. La campaña del aniversario se basa en la fascinante historia de HARIBO, pero mirando siempre hacia delante y celebrando «Juntos 100 años felices».